Familias numerosas

Hay una mentalidad dominante que hace depender el número de hijos del dinero que se gana. No voy a ser yo quien diga que no tiene nada que ver. Pero si puedo constatar que la gran mayoría de familias que tienen muchos hijos, si se plantearan el problema en la misma clave, no los tendrían. Al final se trata de valores y prioridades que nos retratan

No es cierto que el obstáculo principal contra la natalidad en España sea la crisis económica, por más que ésta implique en lo inmediato alguna caída adicional en la tasa de fecundidad. Cuando todo iba bien, en el largo ciclo expansivo de la economía entre 1994 y 2007, los españoles no teníamos más niños que ahora. Y en Alemania, sin desempleo ni burbuja inmobiliaria, con una renta per cápita mayor que la nuestra, y donde parece más fácil que aquí la conciliación entre vida laboral y familiar, la tasa de fecundidad es tan baja como la española. Tener o no tener hijos es cuestión, sobre todo, de valores y prioridades en la vida.

3 comentarios en «Familias numerosas»

  1. Hola que tal gracias por tu aportación es bueno tenerlo en cuenta para reflexionar y hacer reflexionar a otros.Quizá un dia tenga una familia numerosa.O quizá mi familia sea la madre Iglesia si me hago por ejemplo monje.Poco a poco Dios me va guiando.
    Cuidate.
    Un saludo.

  2. Hola, estoy ojeando un poco este blog por mis inquietudes cristianas en el intento de acercarme más a Dios, a la Verdad, entonces si desean hablar de economía les recomiendo que lean a la Escuela de Salamanca donde nació la ciencia económica, principio del fin del mercantilismo y comienzos del capitalismo. Sí, los españoles fueron quienes comenzaron a poner las bases a raíz del descubrimiento de América.

    A finales del siglo XV y comienzos del XVI tuvo lugar un cambio fundamental en el funcionamiento de la economía. Por una parte, los descubrimientos y conquistas de los españoles habían dado lugar, por vez primera desde el inicio de la Humanidad, a la existencia de una economía mundial (globalización). Alrededor de la plata americana, se alzaron las avideces chinas y las necesidades europeas, y en torno a eso se tejieron relaciones que iban de Potosí a Sevilla, Génova y Amberes, y también de Potosí o de México a Acapulco, Manila y Pekín. Precios, tipos de interés, inflación, desarrollos materiales, se determinaban por este entrecruzamiento de relaciones económicas de todo tipo.

    Simultáneamente, al llegar Alfonso de Alburquerque al Estrecho de Ormuz -la ciudadela de Ormuz cayó en manos portuguesas en 1515 , Goa y Malaca, liquida la complicada maraña de los contactos de Europa con Africa y Asia que habían tejido los árabes. En el triángulo Sevilla, Lisboa y Amberes se concentró la riqueza, incluso la opulencia, de esa nueva economía mundial. La transformación también se debió a la aparición de unas nuevas instituciones, que hicieron posible que el capitalismo irrumpiese entre nosotros, con fuerza, por primera vez y para siempre. La partida doble o la letra de cambio son algunas de estas novedades.

    La Contabilidad la creó un franciscano maestro de Leonardo da Vinci.

    Con respecto a las familias numerosas y el envejecimiento de la población, han de plantearse otros puntos de vista como puede ser el que un trabajador en España cuando se levanta por la mañana se dispone a pagar 18 impuestos cada día. Las sociedades de consumo o consumistas tienen esta característica y no como se hace creer a las masas que son las sociedades capitalistas. Justo lo contrario, en las sociedades capitalistas reina el AHORRO y no el CONSUMO. Y la natalidad es la inversa de la sociedad consumista.

    Les aconsejo que antes de escribir algo sobre economía sean duchos en el tema, ya que la confusión en la materia es peligrosa para el alma.

  3. JSP,

    de Escuela de Salamanca se bastante, no se exactamente a que te refieres con lo de ser ducho en la materia. En cuanto a lo de que la confusion en la materia es peligrosa, estoy totalmente de acuerdo.

    Efectivamente, el capitalismo, palabra manoseada, descansa sobre el capital, es decir, sobre el ahorro y no sobre el consumo. En cualquier caso, hay distintas ramas del mismo y ninguna de ellas llevada con claridad a la practica. Las sociedades que comunmente se llaman capitalistas lo son poco, o lo son en parte. Reina en mayor o menor medida el mercantilismo, hacer negocios al calor del poder.

    Sobre el tamaño de las familias, me remito al post: no es un problema economico, es un problema en cuanto a la percepcion y la actitud ante la vida

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