2007 27 Ene
17066 visitas
- Al atardecer de la vida, ¡me examinarán del amor!
- ¿Para qué tenemos tiempo?
- A veces se nos olvida que todas las horas son para amar.
- ¿No hay tiempo? ¿No hay amor?
- Con un reloj como este quizá nuestro ritmo vital, fuese más al ritmo del amor.
- ¡Es imposible amar a determinados ritmos!
- Marta, Marta ¿En que te afanas?. María ha escogido la mejor parte.
- El amor crece al ritmo de un : tic-tac, tic-tac,…
- Todo lo que se hace, hay que hacerlo amando.
- Nada de nuestra vida se escapa de la posibilidad de ser amado y de amar.
- Siempre es tiempo de amar.
- Si algo nos puede distinguir es vivir al ritmo de este reloj donde siempre hay tiempo para el amor, la entrega, incluso con cruz, o a pesar de estar en la cruz.
- ¿Qué hora será madre, la hora de amar?
- Ser contemplativas en la acción,…ser acción en el amor,…
- ¡Ojalá nos encontremos con profetas que nos recuerden eso: es la hora de amar!
- …………………………..
Vía adcspínola
enero 29th, 2007 at 14:35
Hola, me parece genial eso de la hora de amar. Más aún en estos tiempos violentos. Un saludo desde Lima, Perú.
enero 29th, 2007 at 20:47
Es cierto… tantas veces somos Marta!
enero 28th, 2008 at 14:36
Suelo ser como Marta, la que se agita e inquieta por muchas cosas, y olvida que solo una es necesaria. Fácil y difícil a la vez.
Me gustaría quedarme con esta para estos días: “ser contemplativos en la acción”
septiembre 1st, 2009 at 20:44
Qué oportuna meditación, tiempos de odio y guerras. seamos profetas…hablemos de” tiempo para el amor,entrega ,incluso en la cruz…..bellisímo !!! Gracias Dios los bendiga.
septiembre 2nd, 2009 at 12:05
Gracias por este rato de reflexión, María, Dani y quien más sea menester.