Que toda la vida es sueño

Y los sueños sueños son

Tras la rueda de prensa posterior a la Comisión Permanente de la Conferencia Espiscopal Española,  de esta semana, un sacerdote escribe (donde él pone «pensaba» pongamos nosotros «soñaba»)

«Pensaba yo que la obligación de los obispos, en estos momentos en los que el pueblo sufre, llora y calla, era la de ‘echarse al monte’ de la crisis y convocar a una gran movilización general. Provocar un tsunami de solidaridad.

Pensaba que iban a invitar a todos los católicos (los de misa y los ocasionales) a ser mucho más solidarios con los que están sufriendo la crisis en sus propias carnes.

Pensaba que iban a salir diciendo que los obispos que los tienen van a habilitar sus palaciones para todos los sin techo que en ellos quepan. Que los monasterios van a ofrecer alojamiento gratuito y, acaso, algún trabajo. Y lo mismo los conventos de monjas y de frailes. Y todas las parroquias del país. Y todas las innumerables obras de Iglesia.

Pensaba que iban a invitar a los cristianos de a pié a rebuscar en sus bolsillo y aguzar su creatividad: compartir el sueldo, ofrecer horas de trabajo, comprar en las tiendas pequeñas de los vecinos, conceder microcréditos, privarse de lo superfluo…

Y todo ello publicitado a los cuatro vientos, en una especie de toque a rebato mediático. Para que ningún católico (fiel, canónigo u obispo) pueda llamarse a andana.

Pensaba que iban a decir los obispos que si por algo se nos tiene que distinguir a los cristianos es por el amor. Como el buen samaritano. Y resultan que sólo han hablado de catecismo, de congresos y de sus propios y abultados presupuestos.»

Y he recordado el famoso I have a dream de Martin Luther King.

Y la frase del Cardenal Martini, «Hoy ya no tengo esos sueños»

¿Quién de nosotros da el primer paso para que estos sueños se hagan realidad?

Sevilla, 29 de febrero de 2012Foto de Hemeroflexia de Andrés Trapiello

3 comentarios en «Que toda la vida es sueño»

  1. Me ha encantado Nano,ojalá vivamos esa invitación de amor al otro. Son muchas mochilas las que llevamos en la espalda que nos impiden vivir como el buen samaritano…y llevar nuestros sueños a la realidad….

  2. Mientras los cristianos sigamos manteniendo el sistema injusto que hemos creado entre todos, mientras sigamos mirando para otro lado y digamos «yo ya aporto para Cáritas en mi parroquia», mientras demos sólo limosna y no nuestro compromiso y entrega, mientras sigan -algunos- participando sólo en manifestaciones conformistas que no convocan a la solidaridad con el desposeído por el sistema NO hay nada que hacer. Y esta actitud nuestra, las de los supuestos cristianos, es la que ve la sociedad no creyente, reafirmándose así en sus posturas, y lo digo con conocimiento de causa ya que me muevo casi exclusivamente entre ateos, que en muchos aspectos se comportan de un modo más cristiano que muchos que no salen de la iglesia.
    Como dice el Caballero Trueno, con obispos o sin obispos la iglesia somos más y somos todos.

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