Vida oculta de Jesús

John le Carré escribió que hay que pensar como un héroe para portarse simplemente con decencia en la vida cotidiana, y casi todos nosotros creemos que hace falta un impulso de rebeldía y una vocación de disidencia para atreverse a no secundar la injusticia. Pero lo mismo que muchas grandes canalladas las cometen personas dedicadas con celo al cumplimiento del deber, también hay actos de heroísmo y de resistencia que se llevan a cabo sin aspavientos y gente de orden que en un momento dado elige decir no, llevar la contraria, aceptar el escarnio e incluso la persecución.

Todos ellos eligieron en algún momento de sus vidas negarse a obedecer ciertas órdenes o atreverse a romper ciertas reglas con la plena seguridad de que se buscarían probablemente la ruina y con toda seguridad el rechazo de la mayor parte de aquellos con los que convivían y a quienes respetaban. Ninguno actuó forzado por las circunstancias ni por un interés personal. Cada uno de ellos, a cambio de pagar un precio muy alto, actuó con justicia y salvó o mejoró las vidas de otros. Ninguno ha obtenido la menor recompensa.

 

Leo el primer párrafo de «Heroes imposibles» de Antonio Muñoz Molina en Babelia, el cultural de El País. La mayoría de las veces sus miradas sobre una exposición, sus lecturas sobre un libro, sus comentarios a la realidad herida me sirven de inspiración. Los espero con gusto cada sábado.

Jesús de Nazaret

No he podido dejar de pensar en Jesús de Nazaret, cuya Pascua (Pasión, Muerte y Resurrección) tenemos tan cercana, tan al alcance de la mano.  Aprovechar la Semana Santa para contemplar a Jesús, y en Jesús a la humanidad sufriente, a la humanidad heroica, a la humanidad que se entrega sin esperar nada a cambio, a la humanidad que en silencio vive en plenitud su vocación a dar la vida por los demás. Y lo hacen de una manera callada, sencilla, humilde, sin pretender nada, sin querer aparentar nada, como si no tuvieran ego, como si solo tuvieran ser. Y ser para los demás.

Jesús, el judío de Galilea, el vecino de Nazaret, el buscador de Dios, el profeta del reino, el curador de la vida, el defensor de los últimos, el amigo de la mujer, el maestro de la vida, el creyente fiel, el resucitado por Dios. Estos son los títulos de la obra de José Antonio Pagola, Jesús, aproximación histórica.

Aproximarnos al Jesús de la historia, con fe renovada en este hombre, Dios mismo, que pasó desapercibido, uno de tantos, en un pequeño pueblo de Galilea, durante treinta años. Sin hacer ruido, sin alharacas, sin hacer otra cosas que vivir como uno más, estando con nosotros.

Hermanitos de Jesús

Esta es la vocación de los hermanitos de Jesús, y de las hermanitas de Jesús, hijos espirituales de Charles de Foucauld, con el que tanto comparto. Su oración de abandono, dicha desde los labios de Jesús, nos puede ayudar a vivir más santamente la Semana Santa.

Padre, me pongo en tus manos, haz de mí lo que quieras, sea lo sea te doy las gracias.

Estoy dispuesto a todo.
Lo acepto todo, con tal de que  Tu voluntad se cumpla  en mí y en todas tus criaturas. No deseo nada más, Padre.
Te concedo mi vida, Te la doy con todo el amor de que soy capaz, porque se que me amas y necesito darme, ponerme en tus manos sin limitación, sin medida, con una confianza infinita, porque Tú eres mi Padre.

 

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