Tu santidad

Tu santidad, tu gloria, tu inmenso amor en torno a mi. El aire, la luz, la lluvia, mi cuerpo, mis músculos, todo es santo, todo es creación, amor para mi. En Ti soy, de Ti vivo, tengo la vida recibida, aceptada, salvada por Ti. Todo es santo: vivir, comer, dormir, pensar, existir. Me penetras, me sujetas, me queires, me rodeas, me salvas, me llevas como l amadre lleva a su hijo en su seno, llena ed ilusión y ternura.

Kiko Argüello

Felicidades, Josefina

A Josefina M, en su 90 cumpleaños

 

En el centro de tu corazón es donde vive Dios. Esta es la vida de la santa: coloquio de amor…

Esto dice el amante:

– Para ti mi gozo pleno. Para ti. No puedes tenerme más que a mí. ¿Es que no te basto?

Y ¿qué responderás tú, pequeño corazón llamado a amar? Por Amor al Amor abandonado, que des lo tuyo al Amor cada vez más rápidamente. Solo así lo veré a El en ti.

Chiara Lubich, Mar de llama

 

El lenguaje del paraíso

Creo saber cuál es el idioma que el emperador Federico -¡ojalá esté ardiendo en el infierno!- quería conocer. Cualquier palabra,  en cualquier lengua , dicha amorosamente, desciende de este idioma. Tal vez el amor con el que Dios le habló a Adán antes de la expulsión del Edén  sea el verdadero  idioma del Paraíso, y sus ecos resuenan débilmente en las torpes palabras de amor que proferimos con nuestras bocas imperfectas

Verónica Murguía, El lenguaje del paraíso, en El ángel de Nicolás