Jueves Santo

 

Para contemplar

 En un pueblo perdido del desierto de Atacama, uno de los lugares más secos del mundo…
En un pueblo tan desconocido para la historia como era Nazaret en tiempos de Jesús…
Se hace presente el amor de Dios, el amor fraterno, el amor del servicio, el amor que construye Iglesia.
En esa capilla se actualiza, cada vez que se celebra la eucaristía, la última cena de Jesús

Y Jesús mismo nos invita a recostar la cabeza en su costado, a adorar y a  morir de amor.

“Quedéme y olvídeme,
 el rostro recliné sobre el amado,
 cesó todo y dejéme,
dejando mi cuidado,
entre las azucenas olvidado”

En el desierto, en un pueblo perdido, se encuentra el oasis de la presencia viva de Dios, el manantial de su gracia.

¡si conocieses el don de Dios!

Para rezar

con Dime una Palabra

21 de abril de 2011
Jueves santo
Jn 13, 1-15 Habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo
Aquí se manifiesta la belleza, la bondad, la verdad de tu vida, de tu vida entregada para nuestra salvación. Nos has amado, nos amas, nos amarás, hasta el extremo. No hay gesto más grande de amor que dar la vida. Y lo simbolizas en el gesto más sencillo de servicio, para que aprendamos. Me postro contigo, contemplo, te doy gracias, y adoro

1 de abril de 2010
Jueves Santo
Jn 13, 1-15 Os he dado ejemplo…
….para que lo que yo he hecho con vosotros, vosotros también lo hagáis.  Eso el lo que te pido, Señor, en este día santo: que me unas a ti, que me concedas amar con tu amor, pues no se amar como tú amas,  vivir con tu vida, pues no se vivir como tu, pasar haciendo el bien porque te sigo, decir palabras que sanan y salvan porque las escucho de tu boca, las guardo en el corazón y las pronuncio en tu nombre. Con tu gracia, te sigo.

9 de abril de 2009
Jueves santo
Jn 13, 1-15 Los amó hasta el extremo
Déjame reclinar la cabeza en tu regazo. Déjame ver cómo te quitas el manto, y nos lavas los pies, sigo indeleble de tu amor hecho servicio; déjame, Señor, escucharte: “os he dado ejemplo para lo que yo he hecho con vosotros, vosotros también lo hagáis”. Concédeme desvivirme en ti, Señor, en este Triduo Pascual, cada día de mi vida, en el servicio de una vida entregada, contemplando tu amor. Hasta el extremo.

Para escuchar la alabanza de la Iglesia

En una de las piezas más hermosas del gregoriano, que se canta durante el Triduo

Cristo por nosotros se hizo obediente hasta la muerte
y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo levantó sobre todo
y le dio el nombre sobre todo nombre

Deja una respuesta