Dios y el mal

A partir de un momento decisivo para la Humanidad, lo que Karl Jaspers denominó «época axial» (entre los siglos VIII y III antes de nuestra era) algo cambia en nuestro mundo, de una manera tan inexplicable como apareció el lenguaje hace 200.000 años o el arte hace 50.000. La figura aterradora del poder -el Dios, los dioses, la deidad- se concibió como buena. Sin comprender lo que esto supuso para la Humanidad, seremos injustos con las religiones. Apareció, en la figura de Dios, un modelo de perfección, un garante de la justicia, un liberador, una defensa contra el tirano, un protector. Dios era una utopía, y el papel de las utopías no es prometer un mundo mejor, sino afirmar que el presente puede mejorar.

JA Marina

El hijo del trueno. LLuvia de mis pecados. Sin preguntas.

25 de julio
Santiago Apóstol
Roncesvalles-Zubiri
1ª etapa

Inicio la peregrinación, en tu nombre, Señor.

Salimos de Roncesvalles a las seis de la mañana. Muy nublado. Amenaza lluvia. Resuena en la piedra el bordón, y mi corazón hace eco.

Al llegar a la cruz de Roncesvalles, relámpagos y truenos. Santiago, Bonaerges, se nos hace presente al inicio del camino, en su solemnidad.

Al pasar por Burguete comienza el diluvio universal. Poner delante los tiempos míticos de la creación, el pecado, el arca…Parece que las cataratas de Iguazú se han venido a pasar el día, oscuro como la boca del lobo, hasta estas lindes de los Pirineos. Si la lluvia es una bendición hoy nos bendices copiosamente.

En Espinal, al entrar en el bar para desayunar, estoy empapado hasta el tuétano. Ya me he preguntado mil veces que hago yo bajo tanta, tantísima, lluvia. Lluvia de mis pecados. Lluvia en la oscuridad, en los hayedos, los robledales, en un bosque que se hace profundo y vaporoso. Me doy cuenta que no hay que pensar, ni quejarse, si resignarse, sino tratar de vivir el momento presente del camino, tal y como viene. Con los pies chapoteando de incertidumbre y barro.

Alto de Mezquiritz, una vista hermosísima, niebla y verde de Escocia. Tímidamente quiere rasgar el cielo el sol. Una lápida: “Aquí se reza a nuestra señora de Roncesvalles”. Rezo: Alégrate, María. Hágase en mí según tu Palabra. Y Habitó entre nosotros.

Solo miro el camino. Los interrogantes escampan.

Al llegar a Zubiri estoy agotado, con calambres, no puedo dar un paso. Llegamos los primeros al albergue, una clase de escuela. Al minuto aparece una norteamericana, con toda la ropa empapada. Le animo. Estar atentos a las necesidades de los otros.

Te vas haciendo presente. En el otro. Cada vez que…

Terminamos de comer, lluvia, frío, ambiente desapacible. Empiezan a llegar peregrinos calados pro la lluvia temprana y tardía.

Mejor no hacerme preguntas. Quizá esa sea la respuesta. En este momento, como respuesta, empieza a salir definitivamente el sol.

Como los caracoles sacan los cuernos empezamos a sacar, para secar, botas, calcetines húmedos, pantalones…y personas al sol. Se desvela un valle verde y hermoso, una verde pradera donde nos haces recostar.

En el albergue estamos casi treinta personas, en la misma sala. Hay dos. Ambiente de cordialidad agradable. Van apareciendo las historias, los planes, las expectativas.

Celebramos la eucaristía en la parroquia del pueblo. Tu mesa y tu palabra.

“Todo es para vuestro bien”, nos dice hoy la carta a los Corintios.

En tus manos, Señor, mi peregrinación. Celebrar la eucaristía me reconforta. Te haces presente en el camino. Te reconocemos al partir el pan.

A las ocho cena. A las nueve y media, ya en la cama, hablo con un oculista catalán. Cerramos los ojos.

En tus manos, Señor.

Evangelización visual. Dan Stevers

Hubo un tiempo en que la gente no sabía leer ni entendía al cura leyendo en latín y se explicaban las escrituras y la teología por medio de iconos y esculturas en el interior o las fachadas de las iglesias. Hoy la gente no quiere leer ni escuchar, ¿será tiempo de explicar la fe con los medios actuales de difusión popular?

Creo que sí, y ya empieza a haber gente dedicada a ello profesionalmente. Es el caso de Dan Stevers que desarrolla «mini-movies» de unos segundos en los que transmite algún mensaje de la fe de forma muy vistosa y atractiva.
La pega de momento es que sus trabajos suelen estar en inglés, por eso hace unos meses le pedí permiso para doblar uno de sus vídeos para una actividad y desde hace unos días ya podemos disfrutar ese mismo vídeo también con el texto en español, ampliando así la colección de mini-movies en español

Además de las mini-movies ofrece toda una colección de tutoriales y plantillas para que poco a poco, más gente pueda desarrollar este tipo de material

Espero poder poner algún día mi granito de arena también en este campo de la evangelización visual.

De Madrid a Roncesvalles. Inicio la peregrinación. La tentación de tenerlo todo calculado.

Madrid-Roncesvalles
Etapa prólogo

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Sea lo que sea, te doy las gracias.

Escribo este primer episodio en Roncesvalles.
Esta mañana, al salir de casa, en Madrid, me he hecho la señal de la cruz. Acompáñame, Dios mío, en mi peregrinación. Peregrino hacia ti, con deseo de ti, porque te amo. Peregrino porque quiero hacerme consciente del camino de mi vida. Tú eres el camino. Tú eres mi camino.

Siempre quiero controlar y también quiero controlar el camino. Es mi tentación. Tengo ya calculadas las etapas; dentro de 29 días he tenido que terminar. Por eso, como siempre, me centro en mis posibilidades, en mis fuerzas, en mi…en vez de abrirme al camino, como me han aconsejado. Quizá aprenda estos días.

Dame, Señor, la gracia de centrarme en tí. Dame la gracia de caminar hacia la conversión. Te deseo y este deseo es el que me pone en camino. A pesar de mis pecados, desde ellos, tengo sed de ti, como tierra reseca.

Ayer recibí tu gracia y tu perdón sacramental. Dame tu amor y gracia para peregrinar. Que ellas me basten.

La noche pasada he dormido inquieto. A las 5.30 ya estaba despierto. No controlo lo que me va a pasar el próximo mes. Surgen fantasmas, neurosis, soy a veces tan neurótico, me imagino todo tipo de tragedias o calamidades; procuro desterrarlas de la imaginación. Han sido sueños, que me vuelven en el autobús, hacia Pamplona.

Voy recitando Señor Jesucristo, ten misericordia de mi.

Quiero hacer de esta oración del corazón mi compañera de camino, como el peregrino ruso. Quiero que me descienda a lo mas profundo de las entrañas, donde tu me tejes.

Acabo de pedir la credencial del peregrino.

Subimos Beltrán y yo hasta el alto de Ibañeta, dando un paseo vespertino. Hace un sol espléndido. La panorámica que se divisa es muy hermosa. Una carretera de serpentina baja a Saint Jean Pied de Port. Teníamos que haber salido desde allí, pero…

Te alaba la creación.

«El que me ofrece acción de gracias ese me honra. Te han explicado, hombre, el bien que Dios quiere de ií: simplemente que respetes el derecho, que ames la misericordia y andes humilde con tu Dios.»

Que andes humilde con tu Dios. Que andes como peregrino.

Participo en la eucaristía en la Colegiata. Antes he rezado el rosario. La Virgen de Roncesvalles me acerca a ti.

Me impresiona un señor mexicano, con más de 65 años, que no sabe ni lo que es la fecha amarilla. No se si es un insensato, o que confía demasiado en ti. ¿Demasiado?

A las diez se apaga la luz.
Unos pies cercanos apestan.
¿Qué me espera? ¿Llegaré a Santiago?
En tu paz; aunque no me duerma.

Camino de Santiago. Diario de un peregrino. Por amor a Tu nombre.

Por amor a Tu nombre”

Comparto con vosotros un diario.Es el diario de una persona que comparte su ser peregrino.
Lo iré publicando, en diferentes entradas, a lo largo de las próximas semanas.

Es un diario de peregrinación, un itinerario existencial, un yo que se narra, que dialoga con un Tú, que es Dios.

Dios siempre presente, que se presiente y se intuye, aunque no se vea, a lo largo de un camino.

El Tú de Dios que, sin sombra en la calzada, con una sombra que recoge en la palma de su mano, empuja suavemente, acompañando el caminar.

Desde Roncesvalles hasta Santiago de Compostela, el Camino francés atraviesa el norte de España, metáfora de la vida, desde la salida del sol hasta su ocaso.

Mucho caminantes escriben su diario, donde comparten con el cielo, consigo mismos y a veces con los demás, qué es lo que busca, qué le mueve a ponerse en camino, qué le saca de su tierra y de su casa y le convierte en un icono de lo que cualquier ser humano es: un caminante.

Cada peregrino, con su ser, sus palabra y sus gestos,  nos narra y da testimonio de los caminos por los que discurre su peregrinar, lo que aprende por esos senderos que suben, que bajan, que son tortuosos y a veces rectos; nos cuenta lo que ve, lo que escucha lo que celebra, lo que comparte, lo que calla, lo que visita o por quien es visitado; nos habla de sus cansancios, de sus fatigas, de sus descansos, de sus reposos. De sus tristezas y alegrías. En definitiva, nos abre a su itinerario vital.

Lecturas para verano I

 

 Muchas personas en nuestra sociedad llevan a cabo dietas de adelgazamiento, se apuntan a un gimnasio, programan un fin de semana en un balneario o simplemente realizan ejercicios físicos cada día. Con todo ello pretenden conseguir un mejor tono vital, purificar su cuerpo y su mente para sentirse mejor.

¿Y si fuéramos capaces de purificarnos también de las toxinas espirituales, es decir, de todos esos hábitos, recuerdos indeseados, tentaciones y distracciones, que nos impiden disfrutar de la vida como verdaderos seguidores de Jesús y personas felices e integradas espiritualmente?

Un capítulo para ver de qué va este libro