Valores en crisis y valores en alza

Los valores no están en crisis. En crisis están las personas que viven según determinados valores.

En crisis están las personas que se dejan arrastrar por la comodidad tras lamentos esteriles; quienes dejan en manos de otros la tarea que les corresponde, pensando que aquello que debemos hacer ya lo hará otro. En crisis están los que han puesto su felicidad en el consumo, los que no anhelan lo transcendenete, quienes sólo viven pensando en sí mismos y en el hoy. En crisis está quien huye de las dificultades, quien elige el camino fácil.

En cambio, en estos tiempos de incertidumbre, hay quien demuestra que es posible vivir de otra manera y es luz y esperanza para muchos. Quienes se enfrentan a las dificultades, quienes asumen sus responsabilidades y ayudan a que otros así lo hagan, quien ha puesto su felicidad en Algo más alto, quien mira de frente lo trascendente y le da la mano al hermano. Quien mantiene la mano tendida al que ha perdido el sentido, al que vive su vida según valores en crisis y le invita a cambiar.

Cristo el Bello V

Gozaremos, por tanto, hermanos, de una visión que los ojos nunca contemplaron, que los oídos nunca oyeron, que la fantasía nunca imaginó: una visión que supera todas las bellezas terrenas, la del oro, la de la plata, la de los bosques y los campos, la del mar y el cielo, la del sol y la luna, la de las estrellas y los ángeles; la razón es la siguiente: que esta es la fuente de todas las demás bellezas»

San Agustín

Dos poetas y un salmo

Dos mujeres, dos seres habitados por el trascendente que abre sus sentidos a lo más profundo de lo real, que siempre está agazapado delante de nuestros ojos.

Dos poetas. Dos místicas. Dos enamoradas de la palabra.

Las dos en su huerto cerrado. Dos ciervas con sed de lo trascendente en sus vidas:

Como busca la cierva corrientes de agua así mi alma te busca a ti, Dios mío, tiene sed de Dio, del Dios vivo, ¿cómo entraré a ver el rostro de Dios? (Salmo 42)

Emily Dickinson  

 

Apenas salió de su jardín, de su casa en Amherst, y, excepto cinco poemas (tres de ellos publicados sin su firma y otro sin que la autora lo supiera), su ingente obra permaneció inédita y oculta hasta después de su muerte. Hoy todo el mundo la reconoce como una de las que ha hecho presente la Poesía en nuestra historia. Una grande.

Para ella a Dios le alcanzamos a través de la naturaleza, la naturaleza es un a Biblia abierta, desde donde nos llega la palabra:

El brillo del sol me habla esta mañana, y la afirmación de Pablo se vuelve real: “el peso de la Gloria”

“La suya era una escritura del interior concentrada en la gloria de lo pequeño, el misterio de lo cotidiano y la universalidad de los doméstico(….)Emily Dickinson encontraba una comunicación con lo absoluto no a través de las grandes ideas y creencias, si no desde una atenta interioridad que le permitía tener una percepción cuidada y abierta, capaz de captar en los más mínimos matices de los hechos y de las cosas algo que les daba sentido y les elevaba de lo inmanente del yo o de la naturaleza a un grado si no de trascendencia si de perplejidad.
Jaime Siles

Había muerto yo por la Belleza;
me cercaban silencio y soledad,
cuando dejaron cerca de mi huesa
a alguno que murió por la Verdad.

En el suave coloquio que entablamos,
vecinos en la lúgubre heredad,
me dijo y comprendí: Somos hermanos
una son la Belleza y la Verdad

Santa Teresa de Jesús

Nuestra santa andariega pasó casi treinta años en el monasterio de la Encarnación, de Avila, dedicada a la oración:

“que no es otra cosa oración mental, a mi parecer, sino tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos ama”

Tanto amor recibido la impulsa a comenzar la reforma del Carmelo, las fundaciones.

Grande entre las poetas en castellano, mística, doctora de la Iglesia. Convencida de que está habitada por dentro por la presencia del mismo Jesús

Pues si cuando (Jesús) andaba en el mundo, de sólo tocar sus ropas sanaba a los enfermos, ¿qué hay que dudar que hará milagros estando tan dentro de mí, si tenemos fe, y nos dará lo que pidamos, pues está en nuestra casa?

La Hermosura en ella. En ti y en mi. En la poesía.

¡Oh hermosura que excedéis
a todas las hermosuras!
Sin herir dolor hacéis,
y sin dolor deshacéis,
el amor de las criaturas.

Oh ñudo que así juntáis
dos cosas tan desiguales,
no sé por qué os desatáis,
pues atado fuerza dais
a tener por bien los males.

Juntáis quien no tiene ser
con el Ser que no se acaba;
sin acabar acabáis,
sin tener que amar amáis,
engrandecéis nuestra nada.

La músia cantada: el salmo

El arte y la vida no son dos cosas distintas sino una sola realidad

Benedicto XVI dijo estas frases al final del concierto que el viernes 20 de abril tuvo lugar en el aula Pablo VI, como regalo por su  85 cumpleaños. Interpretaron obras de Mendelssohn.

El arte como alabanza a Dios, Belleza suprema, está en la base de las composiciones de Mendelsohn, y esto no solo por lo que se refiere a la música litúrgica o sagrada, sino a toda su producción.

Podemos escuchar, de  Mendelssohn, el salmo 42 y hacerlo oración

Como busca la cierva corrientes de agua así mi alma te busca a ti, Dios mío, tiene sed de Dio, del Dios vivo, ¿cómo entraré a ver el rostro de Dios?

Cristo el Bello IV

 

El pastor bello

Juegan las traducciones con los conceptos de bueno y bello, en hebreo, latín y griego. Eso dicen los entendidos: ‘Santo’, ‘bueno’ y ‘bello’ son conceptos que se solicitan mutuamente. En Dios, como todos sus atributos, belleza y bondad se identifican.

El arca de las palabras, de La Palabra, se llena de sugerencias.

Tras la creación, vio Dios que todo era bello.

Yo soy el Pastor, el Bello.
La estética unida a la cristología, para el gozo de nuestra contemplación. Unido al bello adquiero belleza. Cristo, el pastor bello, que nos conduce hacia fuentes tranquilas de su belleza, que repara nuestras fuerzas con su bondad bella y verdadera.

Quiero perderme en el océano infinito de tu belleza, Señor. Quiero que mi vida se transforme por el asombro de contemplarte,  que el asombro se convierta en admiración, en  embriaguez, en  gozo indecible.

 

La belleza es clave del misterio y llamada a lo trascendente. Es una invitación a gustar la vida y a soñar el futuro. Por eso la belleza de las cosas creadas no puede saciar del todo y suscita esa arcana nostalgia de Dios que un enamorado de la belleza como san Agustín ha sabido interpretar de manera inigualable: «¡Tarde te amé, belleza tan antigua y tan nueva, tarde te amé!».

Beato Juan Pablo II  carta a los artistas,  Pascua de Resurrección de 1999.

John Rutter, The Lord is my Shepherd, Psalm 23

Puedes escuchar esta composición, dejar que se haga oración en ti…
«El Señor es mi pastor, nada me falta…»
The Lord is my shepherd, therefore can I lack nothing.
He shall feed me in a green pasture; and lead me forth beside the waters of comfort.
He shall convert my soul; and bring me forth in the paths of righteousness, for his Name’s sake.
Yea, though I walk through the valley of the shadow of death, I will fear no evil; for thou art with me; thy rod and thy staff comfort me.
Thou shalt prepare a table before me against them that trouble me; thou hast annointed my head with oil, and my cup shall be full.
But thy loving-kindness and mercy shall follow me all the days of my life; and I will dwell in the house of the Lord for ever.
http://youtu.be/s8LztTF5F80

Arquitectura, narración y evangelio

 

Arquitectura popular


Visito Quintanilla de los Oteros (León), tras depositar en la tierra a la madre de un religioso amigo. Me admira la sobriedad de cementerio, el pueblo semiabandonado, la arquitectura popular.
La iglesia se mantiene en pié. El techo se cayó, pero ha sido repuesto por los veraneantes asturianos, nuevos habitantes del pueblo. Algunas casas han sido arregladas, otras están en la ruina total.
Belleza de algunas edificaciones con toda la sabiduría de la arquitectura popular: el palomar, el granero…
Belleza de lo  más básico: el adobe; de lo más sencillo, lo más humilde, lo más real.


En la arquitectura popular, como  en el evangelio, existe  una implicación vital:
• se enraíza en la tierra y en el pueblo: se liga y dialoga con las tradiciones del entorno;
• predomina el sentido común en sus formas y planteamientos;
•  existe un escaso margen para la frivolidad o la fantasía;
• la obligada economía de medios materiales ejerce un efecto positivo al despojar a la arquitectura popular de casi todo aquello que no sea estrictamente necesario; sobriedad y elegancia como resultados habituales;
• sencillez profunda; soluciones de dentro a fuera;
• realización de una obra definitiva que será utilizada por su autor y seguramente pos sus descendientes: esta circunstancia elimina cualquier aspecto de provisionalidad;
• el esfuerzo personal que el hombre popular dedica a sus obras da lugar a que se establezca entre ambos una relación afectiva de incidencia positiva en el resultado final;
• la arquitectura popular es al propio tiempo una arquitectura de módulo familiar y de conjuntos: los conjuntos se forman por agregación de células lo que da por resultado una variedad y vivacidad

 

La parábola evangélica


Quien escucha estas palabras mías (Jesús se refiere al Sermón de la Montaña) y las pone en práctica se parece a uno que edificó sobre roca…
Comentarios a esta parábola en la comunidad de fe, en la fraternidad:
• Unos cimientos de roca,  como son los de Roblelacasa, (pueblo negro de Guadalajara), de nada sirven si dejamos filtrar el agua por el tejado.
• Cada uno construye su casa, todos tenemos las inclemencias del tiempo, del sufrimiento…
• Unos buenos cimientos vitales son todo lo construido con amor, todo el amor que haya podido recibir en la infancia.
• Sólidos cimientos son las actitudes evangélicas, que se traducen en obras.
• Y las obras con los más desfavorecidos .
• En ocasiones lo que hemos construido parece que se derrumba por la enfermedad imprevista. ¿Dónde quedan los cimientos?

 

Una narración popular

El ciuento nos ayuda a volver a ser como niños: tan necesario para entrar en el Reino de los cielos.
Encontramos la sabiduría del cuento de los Tres Cerditos:
• Construir la casa no solo por apariencia, sino con coherencia.
• El cerdito afanoso construye aunque los otros se burlen, sin importarle su opinión. Pone empeño, dedica tiempo…
• El cerdito trabajador no será rencoroso, y les dejará entrar en su casa en tiempos difíciles.
• Es una casa construida con tesón que es lugar de acogida y refugio para los demás

Oración y relación

En la interior bodega de mi amado bebí

Las relaciones interpersonales se pueden vivir a un nivel superficial, pero también en las más oscuras y penetrantes profundidades. Lo mismo ocurre, analógicamente, con la fe, con la relación interpersonal con Dios. Hay quien se acuerda de Dios solamente cuando tiene que ir al dentista, mientras hay quien continuamente está dialogando con él en soledad y silencio. En la fe viva el ser espiritual se abre todo entero para acoger al Dios que le llama.(Frances Torralba)

en las profundas cavernas del sentido, que estaba oscuro y ciego, calor y luz dan junto a su querido.

El icono es una invitación al encuentro con Dios

Desde la Antigüedad, los iconos han estado muy presentes en la vida de fe de los cristianos, especialmente, de los cristianos de Oriente. Originarios de Bizancio, la iconografía no es únicamente una imagen estética, no es una obra de arte como tal, sino que detrás de esa belleza, hay un gran misticismo. La importancia del icono no es la imagen, sino lo que esa imagen nos transmite. Para los antiguos el icono era un objeto de culto, una presencia a quien invocar y rezar, y cada uno de ellos nos transmite un misterio de Jesús, de la Virgen o de algún personaje bíblico.

El icono no suele ser muy ostentoso, todo lo contrario: es sencillo, bello, expresivo, de colores muy marcados…que nos invita a la contemplación y al encuentro con Dios.

¿Qué simboliza? ¿Qué significado tiene? ¿A qué pasaje evangélico se refiere? Son preguntas muy comunes que nos solemos hacer al verlo. Pero si nos paramos un tiempo delante de él, podremos descubrir su grandeza, la profundidad de la mirada de los personajes…El icono te invita a un diálogo con Dios. Es anuncio, camino y confianza. Es una gran experiencia.

«Habitado por el Espíritu Santo, yo mismo estoy llamado a convertirme en este icono para otros .¿quiénes son aquellos que me miran?¿Cómo les miro con la mirada de Cristo?»
Des icônes pour prier- Frère Luc

Y tú, ¿has rezado alguna vez con un Icono? ¿Cuál es tu favorito?

El cliente siempre tiene la razón ¿Se cumple en la Iglesia?

Diagrama de flujo para el diseño de un producto.

En cualquier proceso de obtención de soluciones, y en concreto en el de desarrollo de productos, el flujo de trabajo y las relaciones cliente – profesional – entorno, se podrían resumir de la siguiente manera (imagen de la izquierda):
Diagrama de flujo para transmitir la fe

Me atrevo a pensar que en materia de fe, moral, misterio… el flujo sería casi el mismo. Poniéndole nombre a las cosas quedaría así (imagen de la derecha).

El caso es que no sé hasta qué punto respetamos este diagrama, o nos lo creemos. Me da la impresión, y me pasa a mí mismo, que desconfiamos de que esto sea así, o deseamos que sea más bien de otra manera, nos gustaría eliminar la parte de las críticas y tener siempre la razón.

Pensando en esto y a raíz de los últimos posts de Dani y su eco, se me ocurren tres posibles caricaturas de tres maneras de deformar este flujo de trabajo:

Modelo 1.
El de “el magisterio infalible”
Modelo 2.
El de “los teólogos descarriados”
Modelo 3.
El de “creo en Dios pero no en la Iglesia”

¿Cómo nos interpela cada una de estas caricaturas? ¿Nos sentimos más cómodos/identificados con una que con otra?
Las tres son posturas radicales a las que tendemos sin darnos cuenta o con las que etiquetamos a la gente. Todas ellas han prohibido la crítica. Personalmente al leer estos posts se me dispararon los prejuicios y acudí a estos estereotipos, a uno u otro, según el caso, poniéndome a favor o en contra como pasó con los que comentasteis las entradas perdiendo el significado original.

No toleramos la crítica porque parece que es desautorizar a la persona o a la institución. Sin embargo, profesionalmente la crítica es el feedback imprescindible para entender y cubrir las necesidades del cliente.

Sin embargo, cuando alguien critica a la Iglesia se le encasilla en el Modelo 3, o si un teólogo lleva una línea que cuestiona el magisterio pasa a ser del Modelo 2, y si alguien defiende la unidad de la Iglesia y la confianza en sus pastores a pesar de los errores, se le encasilla en el Modelo 1. En cualquier caso nos perdemos lo importante: El cliente, que se queda sin resolver su problema, sin colmar su deseo innato de Dios porque el profesional sea el que sea, no ha sabido hacer bien su trabajo y dar una respuesta que sintonice con la necesidad del cliente.

Aquí un ejemplo de «un mal diseño que costó 100 millones«. Se trata del rediseño de un envase de zumo (el de la derecha) que no gustó al cliente y derivó en la caída de las ventas, a pesar de que formalmente es mejor y más actual.

El cliente siempre tiene la razón, pero no porque sepa más que el profesional, sino porque es quien tiene una necesidad y no estará satisfecho hasta que la cubra. El profesional no puede ser el protagonista, sino que es el que, desde su posición autorizada, ha de ser capaz de acompañar al cliente tanto en la fase de poner nombre al problema, como en la de encontrar la solución, como en su posterior evolución y esto solo puede hacerlo quien es capaz de rebajarse hasta donde está el cliente, para poder escucharle y para decirle, no lo que quiere oír, sino lo que debe oír para entender y resolver su problema. Ni que decir tiene que el cliente ha de confiar en la autoridad del profesional, pero si ha solicitado su consejo y se sigue este proceso, es de suponer que se fiará de lo que este le diga.