Discernimiento Ignaciano 10. Conocete, conoce tus frutos

5ª regla: aumentar imagen

Debemos mucho advertir el discurso de los pensamientos; y si el principio, medio y fin es todo bueno, inclinado a todo bien, señal es de buen ángel; mas si en el discurso de los pensamientos que trae, acaba en alguna cosa mala o distrativa, o menos buena que la que el ánima antes tenía propuesta de hacer, o la enflaquece o inquieta o conturba a la ánima, quitándola su paz, tranquilidad y quietud que antes tenía, clara señal es proceder de mal spíritu, enemigo de nuestro provecho y salud eterna.

Sobre los frutos recogidos puedes leer:
La ONU reconoce la labor de la Iglesia en la prevención y lucha contra el sida
Un paseo por Colombia
Déjalo todo y sígueme
Nada de esto fue un error

¿A caso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?
(Mt 7, 15-20)


6ª regla: aumentar imagen

Cuando el enemigo de natura humana fuere sentido y conoscido de su cola serpentina y mal fin a que induce, aprovecha a la persona que fue dél tentada, mirar luego en el discurso de los buenos pensamientos que le truxo, y el principio dellos, y como poco a poco procuró hacerla descendir de la suavidad y gozo spiritual en que estaba, hasta traerla a su intención depravada; para que con la tal experiencia conoscida y notada, se guarde para adelante de sus acostumbrados engaños.

Sobre uno mismo puedes leer:
[aPt.12] ¿Eres fuerte o débil? – Conócete

Si tu ojo te es ocasión de escándalo, sácatelo y arrójalo de ti.
(Mt 18, 5-10)


¿Quieres compartir los frutos de alguna iniciativa que hayas emprendido o conozcas?

El texto de las reglas de discernimiento está sacado del método de ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola

Abrahán

Abrahán es el padre y modelo de nuestra fe. Dios lo atrajo a sí y luego lo probó con miras a hacer de él el padre de un pueblo innumerable. La verdadera posteridad de Abrahán es Jesucristo



Abrahán es el padre y modelo de nuestra fe. Dios lo atrajo a sí y luego lo probó con miras  a hacer de él el padre de un pueblo innumerable. Abrahán vivió bajo el signo de la iniciativa de Dios. Lo escoge de la descendencia de Sem, Le hace salir de Ur de los caldeos (Gen. 11. 30-31), a 9 km del río Éufrates, y lo conduce por los caminos que El quiere a un país desconocido (Heb. 11. 8). Los orígenes de Ur se remontan al año 6.000 a. JC.

Abrahán fue elegido de Dios, en una iniciativa de amor, y le promete un porvenir maravilloso. Todo lo que se le pide es una gran fe y una acogida generosa al designio de Dios. Su porvenir dependerá totalmente del poder y de la bondad de Dios.

Abrahán es un nómada al que Dios le dará una tierra (Gen. 12. 7 / 13. 15 / 17. 8) y le hará muy fecundo (Gen. 12. 7 / 16. 10 / 32. 17) en unas circunstancias que parecen contrarias. Abrahán es ya mayor de años y su mujer Sara ya no está en edad de tener hijos.

Dios purifica y fortifica la fe de Abrahán en la prueba. Le pide que sacrifique a su hijo Isaac, en quien estriba la promesa (Gen. 22. 1) Y Abrahán “no rehúsa a su hijo” (Gen. 22. 12-16). En los cultos cananeos se practicaban los sacrificios de niños. Pero Dios salva a Isaac (Gen. 22. 8. 13). Una vez más, Dios revela que su designio no está ordenado a la muerte sino a la vida.

Abrahán, en la mente de Dios, está llamado a ser “padre de multitudes” (Gen. 17. 5). El cambio de nombre, Abrán por Abrahán, atestigua esta orientación. La paternidad de Abrahán es una paternidad universal (Gen. 22. 18). Su vocación está en ser padre y su gloria está en su descendencia. Las promesas que Dios hace a Abrahán se refieren a su paternidad (Gen. 13. 15 / 17. 7) y se las repite a Isaac y a Jacob (Gen. 26. 3 / 28. 13).

El pueblo elegido, al verse oprimido en Egipto, clama a Dios para que se acuerde de su alianza con Abrahán, Isaac y Jacob (Ex. 2. 23). Y para obtener el favor de Dios, la mejor oración es dirigirse a Abrahán. Yavé responde a los ruegos de Moisés y le dice: “Acuérdate de Abrahán, de Isaac y Jacob…” (Ex. 32. 13).

En el NT. se nos dice que no basta con provenir físicamente de Abrahán para heredar sus promesas. Hay que enlazar con él espiritualmente. Es falsa la confianza que no va acompañada de una profunda docilidad y fidelidad a Dios (Ezq. 33. 24-29 / Mt. 3. 9 / Lc. 16. 24 / Jn. 8. 37-44).

La verdadera posteridad de Abrahán es Jesucristo, hijo de Abrahán (Mt. 1. 1). Abrahán estaba orientado hacia la venida de Jesús. Y todos los que creen en Cristo pueden tener participación en las promesas de Abrahán (Gal. 3. 14).

“Todos sois de Cristo, luego sois descendientes de Abrahán, herederos según las promesas”. (Gal. 3. 28). El “seno de Abrahán” (Lc. 16. 22) es la patria definitiva de los creyentes .

Parábola de dos gemelos en el útero materno

El pasado sábado, José Ignacio González Faus, dio en Zaragoza unas charlas sobre él triduo Pascual. Dijo cosas muy interesantes, pero voy a recoger sólo un material que citó para hablar de la vida después de la muerte y cómo afrontamos lo desconocido. Empleó la siguiente parábola que por lo que he podido averiguar, es una historia relatada por Henry J. M. Nouwen. El texto que circula por internet, es la adaptación que hace Wayne W. Dyer de dicha historia en su libro “Tus zonas sagradas” de donde está extraído el texto que pongo a continuación.

Imagine esta escena si es tan amable.
Dos bebés se encuentran en el útero, confinados en las paredes del seno materno, y mantienen una conversación. Para entendernos, a estos gemelos les llamaremos Ego y Espíritu.

Espíritu le dice a Ego:
“Sé que esto va a resultarte difícil de aceptar, pero yo creo de verdad en que hay vida después del nacimiento”.

Ego responde:
“No seas ridículo. Mira a tu alrededor. Esto es lo único que hay. ¿Por qué siempre tienes que estar pensando en que hay algo más aparte de esta realidad? Acepta tu destino en la vida. Olvídate de todas esas tonterías de vida después del nacimiento.”

Espíritu calla durante un rato, pero su voz interior no le permite permanecer en silencio durante más tiempo.
“Ego, no te enfades, pero tengo algo más que decir. También creo que hay una madre.”

“¡Una madre!” –exclama Ego con una carcajada-. “¿Cómo puedes ser tan absurdo? Nunca has visto una madre. ¿Por qué no puedes aceptar que esto es lo único que hay? La idea de una madre es descabellada. Aquí no hay nadie más que tú y yo. Ésta es tu realidad. Ahora cógete a ese cordón. Vete a tu rincón y deja de ser tan tonto. Créeme, no hay ninguna madre.”

Espíritu deja, resignado, la conversación, pero la inquietud puede con él al cabo de poco. “Ego” –implora-, “por favor, escucha, no rechaces mi idea. De alguna forma, pienso que esas constantes presiones que sentimos los dos, esos movimientos que a veces nos hacen sentir tan incómodos, esa continua recolocación y ese estrechamiento del entorno que parece producirse a medida que crecemos, nos prepara para un lugar de luz deslumbrante, y lo experimentaremos muy pronto.”

“Ahora sé que estás completamente loco” –replica Ego-, “Lo único que has conocido es la oscuridad. Nunca has visto luz. ¿Cómo puedes llegar a tener semejante idea? Esos movimientos y presiones que sientes son tu realidad. Eres un ser individual e independiente. Éste es tu viaje. Oscuridad, presiones y una sensación de estrechamiento a tu alrededor constituyen la totalidad de la vida. Tendrás que luchar contra eso mientras vivas. Ahora, aférrate a tu cordón y, por favor, estate quieto.”

Espíritu se relaja durante un rato, pero al fin no puede contenerse por más tiempo. “Ego, tengo una sola cosa más que decir, y luego no volveré a molestarte.”

“Adelante” –responde Ego, impaciente-. “Creo que todas estas presiones y toda esta incomodidad no sólo van a llevarnos a una nueva luz celestial sino que cuando eso suceda vamos a encontrarnos con la madre cara a cara, y conocer un éxtasis que superará todo lo que hemos experimentado hasta ahora.”

“Estás totalmente loco. Ahora sí que estoy convencido.”

La mirada

«El Señor pues miró a Pedro; ante las calumnias de los sacerdotes, las mentiras de los testigos, las injurias de los que lo golpeaban y abofeteaban, encontró con las misma mirada que anteriormente había visto su turbación a su discípulo sacudido. La Verdad lo penetró con su mirada justo allí donde su corazón tenía necesidad de curación. Fue como si la voz del Señor se hubiera hecho oír para decirle: “¿Dónde vas, Pedro? ¿Por qué te retraes dentro de ti mismo? Vuelve a mí, confía en mí y sígueme. También tú superarás la prueba. No dejes que te desconcierte la debilidad que he tomado sobre mí. Por lo que yo he tomado de ti, he temblado, pero tú, por lo que tienes de mí, no tengas miedo».
San León Magno, s. V

Discernimiento Ignaciano 9. Máscaras y contradicción

3ª regla: aumentar imagen

Con causa puede consolar al ánima así el buen ángel como el malo, por contrarios fines: el buen ángel, por provecho del ánima, para que cresca y suba de bien en mejor; y el mal ángel para el contrario, y adelante para traerla a su dañada intención y malicia.

Sobre la necesidad de desentrañar lo que hay más allá de lo que vemos o sentimos, puedes leer:
Hay algo más, que tus ojos no vieron
Sostenibilidad, una campaña de ACCIONA

Maestro, bueno es estarnos aquí. Podríamos hacer tres tiendas
(Lc 9, 28-36)


4ª regla: aumentar imagen

Propio es del ángel malo, que se forma sub angelo lucis, entrar con la ánima devota, y salir consigo; es a saber, traer pensamientos buenos y sanctos conforme a la tal ánima justa, y después, poco a poco, procurar de salirse trayendo a la ánima a sus engaños cubiertos y perversas intenciones.

Sobre el peligro de que tras una buena intención se esconda un mal sentimiento, puedes leer:
La Hermana Glenda denuncia irregularidades en Producciones La Raiz
Derechos de autor en la música católica
HOWTO HACKEAR Windows XP: Conseguir acceso como administrador

Al fin se separó y dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile pues que me ayude.»
(Lc 10, 38-42)


¿Te sientes libre en tus decisiones, o quizá movido por las pasiones?

El texto de las reglas de discernimiento está sacado del método de ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola

El beso

«Hace unos años, cuando estaba en Irlanda, conducía un día por una carretera secundaria y escuchaba la radio. El programa era un concurso consistente en componer relatos breves, este fue uno de ellos:

– Bienvenido a casa, hijo.
– Hola, Padre.
– Qué alegría me da verte. Hacía mucho tiempo.
– Sí, Padre, mucho tiempo. Ha sido duro. Duro como los clavos. Duro como la madera.
– Ya lo sé. ¿Qué fue lo más duro?
– El beso, Padre, el beso. (Una larga pausa.)
– Sí, pasa y deja que te abrace.

Casi me salgo de la carretera. Después de unos segundos me puse a llorar.»

Megan McKenna, La cuaresma día a día.

La vida que avanza

Llevo semanas contemplando desde la ventana de mi despacho un precioso almendro que ha ido sufriendo el proceso del invierno a la primavera. Ese proceso que muchos también vivimos a lo largo de nuestra vida.
El otoño e invierno deja los árboles secos, sin hojas ni flores, como las etapas en las que uno se siente más vacío, sin encontrar sentido a las cosas que vivimos… pero poco a poco, el brote de las flores empieza a nacer y se va viendo cada día un color más rosado… ese que sentimos cuando volvermos a sonreir, cuando vovelmos a ilusionarnos… es el mismo proceso que vivió Jesús en su muerte y resurrección. Para que el grano de trigo nazca, antes debe morir.

Señor, que sepa acompañarte en el camino de la cruz,
y pueda contigo resucitar del agua nueva.

Discernimiento Ignaciano 8. Consolación con o sin causa

1ª regla: aumentar imagen

Propio es de Dios y de sus ángeles en sus mociones dar verdadera alegría y gozo spiritual, quitando toda tristeza y turbación, que el enemigo induce; del qual es propio militar contra la tal alegría y consolación spiritual, trayendo razones aparentes, sotilezas assiduas falacias.

Sobre las fuentes del consuelo puedes leer:
LE2 Los éxitos y logros de la vida no dan seguridad interior

Os hemos tocado la flauta, y no habéis bailado, os hemos entonado endechas, y no habéis llorado.
(Lc 7, 31-35)


2ª regla: aumentar imagen

Sólo es de Dios nuestro Señor dar consolación a la ánima sin causa precedente; porque es propio del Criador, salir, hacer moción en ella, trayéndola toda en amorde la su divina majestad. Digo sin causa, sin ningún previo sentimiento o conoscimiento de algún obiecto, por el qual venga la tal consolación mediante sus actos de entendimiento y voluntad.

Puedes acercarte aquí a algunos ejemplos de la reacción podría estar desencadenada por una consolación sin causa:
Orar sin cesar, también en la ciudad
Ya no hay distancia, no hay tiempo… todo es posible para Dios

¿No estaba ardiendo nuestro corazón dentro de nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos explicaba las escrituras?
(Lc 24, 13-31)


¿Te apetece dar gracias por esos momentos de Dios en tu vida?

El texto de las reglas de discernimiento está sacado del método de ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola

Película The Road. La carretera

La carretera (en inglés The Road) es una novela escrita en 2006 por el escritor estadounidense Cormac McCarthy, creador de otras novelas como No es país para viejos y Ciudades en la llanura. La carretera fue galardonada con el Premio Pulitzer 2007 en la categoría de ficción, con el James Tait Black Memorial Prize en 2006 y fue finalista para el National Book Critics Circle Award en 2006.
Tomado de la Wikipedia


Puedes consultar una sinopsis de la película pinchando aquí

Salí del cine pensando… «que pena de película, podían haberle sacado más partido, todo lo que parecía que estaba preparando el director, se ha acabado quedando en nada». Pero pasadas unas cuantas horas, incluso al día siguiente, fui descubriendo algo más de lo que la película me sugería.
Dejo algunas ideas sin analizarlas más, entre otras cosas para no destripar del todo la película:


Confianza o desconfianza:

  • Confiar en Dios (en el prójimo) o confiar en las propias fuerzas (sólo en mí)
  • El padre confía sólo en lo que tiene, sus propias fuerzas, y protege al niño de tal forma que, inconscientemente, le aleja de la salvación.
  • Un mundo en que se confía más en la muerte que en la vida. La pistola es la que aparece siempre como último recurso: antes el suicidio que ponerse en manos del prójimo; Y matar antes de que te maten.


Mensaje de esperanza:

  • La muerte queda retratada de muchas formas, una de ellas es camino de esperanza, al cesar la propia resistencia y dejarse en manos del otro, abriendo la puerta hacia una nueva vida.
  • «Dios» les sigue y observa en todo momento. El padre lo percibe como una amenaza y no se deja alcanzar por «ellos».
  • En determinados momentos se ve explícita o implícitamente una oración, seguida de algún gesto de la providencia.


Trascendencia, humanidad:

  • Llevar «la llama»: La esperanza, el espíritu, el deseo, la fuerza, el amor… algo más a parte de la sola vida. El padre vive por amor a su hijo. El niño ha recibido una educación de lo espiritual y lo emplea para reconocer a las personas, para reconocerlas como buenas.
  • Toda la película es una parábola, donde la idea de fondo de «el buen samaritano» está muy presente. Trayendo a escena el dilema humano de renunciar al prójimo por un buen motivo: No puedo ayudar a esa persona, porque podría poner en peligro a mi hijo. Con Jesús, Dios confía en el mundo aunque el mundo mate a su hijo.
  • Para el padre, supone un camino de conversión, cuaresma, desierto, confrontación. El diálogo con su hijo es como un diálogo con Dios, con la conciencia; Enfrentando el ‘yo’ del padre (personaje del padre), con el ‘yo’ del hijo (voluntad de Dios). Se trata de un Dios que quiere humanidad no supervivencia.
  • La película refleja sobre todo la pérdida de la humanidad. En un momento dado dicen algo como esto: «quien quiera que mirara, no encontraría humanidad aquí», y queda explicitamente reflejado a lo largo de la película. Sin embargo en el niño ven a Dios, o a un ángel.
  • El niño no ha aprendido el odio ni la desconfianza, aun tiene la humanidad intacta, por eso se parece a Dios. Si no os hacéis como niños…

«Buscad siempre su rostro»

«El Dios que buscamos espero venga en mi ayuda para que mi trabajo no sea estéril y podamos entender lo que dice este sagrado salmo: Alégrese el corazón de los que buscan al Señor; buscad al Señor y fortaleceos; buscad siempre su rostro. Parece que jamás se encuentra lo que siempre se busca, ¿cómo pues, ha de alegrarse y no sentir tristeza el corazón de los que buscan, si no pueden encontrar lo que buscan?
Si en la búsqueda puede ser encontrado, ¿por qué se dice: Buscad siempre su rostro? ¿Se ha de seguir buscando una vez encontrado? En efecto, así se han de buscar las realidades incomprensibles, y no crea que no ha encontrado nada el que comprende la incomprensibilidad de lo que busca. ¿A qué buscar, si comprende que es incomprensible lo que busca, sino porque sabe que no ha de cejar en su empeño mientras adelanta en la búsqueda de lo incomprensible, pues cada día se hace mejor el que busca tan gran bien, encontrando lo que busca y buscando lo que encuentra? Se le busca para que sea más dulce el hallazgo, se le encuentra para buscarle con más avidez»
SAN AGUSTÍN, De Trinitate XV, 2, 2.

Discernimiento Ignaciano 7. Oppósito per diametrum

12ª regla: aumentar imagen

El enemigo se hace como mujer en ser flaco por fuerza y fuerte de grado…

… porque así como es propio de la mujer, quando riñe con algún varón, perder ánimo, dando huída quando el hombre le muestra mucho rostro; y por el contrario, si el varón comienza a huir perdiendo ánimo, la ira, venganza y ferocidad de la mujer es muy crescida y tan sin mesura; de la misma manera es propio del enemigo enflaquecerse y perder ánimo, dando huída sus tentaciones, quando la persona que se exercita en las cosas spirituales pone mucho rostro contra las tentaciones del enemigo heciendo oppósito per diametrum; y por el contrario, si la persona que se exercita comienza a tener temor y perder ánimo en sufrir las tentaciones, no hay bestia tan fiera sobre la haz de la tierra como el enemigo de natura humana, en prosecución de su dañada intención con tan crecida malicia.

Hablando de plantarle cara a la vida, puedes leer:
¿Para qué quiero yo más vivir?
El circo de la Mariposa

Entonces acercándose, le despertaron, diciendo: «Maestro, Maestro, nos hundimos!»
(Lc 8, 22-25)


13ª regla: aumentar imagen

Assimismo se hace como vano enamorado en querer ser secreto y no descubierto:

porque así como el hombre vano, que hablando a mala parte requiere a una hija de buen padre, o una mujer de buen marido, quiere que sus palabras y suasiones sean secretas; y el contrario le displace mucho, quando la hija al padre o la mujer al marido descubre sus vanas palabras y intención depravada, porquefácilmente collige que no podrá salir con la impresa comenzada: de la misma manera, quando el enemigo de natura humana trae sus astucias y suasiones a la ánima justa, quiere y desea que sean recibidas y tenidas en secreto; mas quando las descubre a su buen confessor o a otra persona spiritual, que conosca sus engaños y malicias, mucho le pesa: porque collige que no podrá salir con su malicia comenzada, en ser descubiertos sus engaños manifiestos.

Sobre la necesidad de compartir tu realidad y no dejarse vencer por ella, puedes leer:
No te escondas más
Carta a Dios
“Te necesito, aunque no te lo diga” – alumno problemático

No temáis a los que matan el cuerpo, y después de esto no pueden hacer más
(Lc 12, 4)


14ª regla: aumentar imagen

Assimismo sea como un caudillo, para vencer y robar lo que desea;

porque así como un capitán y caudillo del campo, asentando su real y mirando las fuerzas o disposición de un castillo, le combate por la parte más flaca; de la misma manera el enemigo de natura humana, rodeando mira en torno todas nuestras virtudes theologales, cardinales y morales; y por donde nos halla más flacos y más necesitados para nuestra salud eterna, por allí nos bate y procura tomarnos.

Sobre el lugar donde realmente estarás a salvo, puedes leer:
La sombra del Altísimo

Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: «¡Quítate de mi vista satanás!»
(Mt 12, 21-23)


¿Te has tenido que enfrentar alguna vez al «mal espíritu» de alguna de estas formas?

El texto de las reglas de discernimiento está sacado del método de ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola

Discernimiento Ignaciano 6. Precaución y humildad

10ª regla: aumentar imagen

El que está en consolación piense cómo se habrá en la desolación que después vendrá, tomando nuevas fuerzas para entonces

Sobre la vida y sus golpes puedes leer:
Catástrofe humanitaria en Guatemala :: Testimonio de Ricardo Donet

Os envío como corderos en medio de lobos (Lc 10, 2-4)


11ª regla: aumentar imagen

El que está consolado procure humiliarse y baxarse quanto puede, pensando quán para poco es en el tiempo de la desolación sin la tal gracia o consolación. Por el contrario, piense el que está en desolación que puede mucho con la gracia sufficiente para resistir a todos sus enemigos, tomando fuerzas en su Criador y Señor

Sobre la necesidad de recordar nuestra pequeñez puedes leer:
Beato Santiago Gapp, mártir marianista del nazismo
Miércoles de ceniza
Dios mío, ayúdame

Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre (Lc 10, 17-20)


¿Te ves capaz de afrontar la desolación y de saber llevar la consolación, cómo lo haces?

El texto de las reglas de discernimiento está sacado del método de ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola