Ceremonia del té. Cha No yû. Entrada humilde I

El hueco de entrada a la estancia del té no mide má de 70 por 70 cm. Su poca altura obliga a los invitados a entrar de forma humilde, llenos de respeto, gateando más que pisando. Desaparecen así todas las diferencias sociales -alto y bajo pasan ambos por el reducido hueco a ese recinto en el que todos son iguales y donde no existen diferencias de clase.

Esta entrada baja es también el acceso a un lugar de transformación en el que todos han de encontrarse con su verdadero yo mismo y con la pazpara, una vez finalizada la invitación de té, volver transformados a la vida diaria aportando allí la paz y la armonía experimentadas. » Gerhardt Staufenbiel, El camino del té.