El asesinato reciente de 6 cristianos en Egipto, las acciones terroristas de Al-Qaeda, la enorme inmigración árabe en occidente… puede hacernos endurecer el rostro para con el mundo islámico. Los católicos estamos llamados a ser hombres y mujeres de reconciliación, no es bueno que nos dejemos llevar ninguna clase de odio. Nosotros seguimos a Cristo, cuyo sufrimiento y resurrección resulta una llamada a trabajar por un mundo más justo, fraterno y solidario. Este trabajo de promoción de la Justicia y la Paz también debemos realizarlo en el mundo islámico. El Papa Benedicto XVI de nuevo nos da una lección sobre esto:
Vía Videos Vaticano