Viga de la Iglesia

samaritanoLa misericordia es la viga maestra que sostiene la vida de la Iglesia. Todo en su acción pastoral debería estar revestido por la ternura con la que se dirige a los creyentes; nada en su anuncio y en su testimonio hacia el mundo puede carecer de misericordia. La credibilidad de la Iglesia pasa a través del camino del amor misericordioso y compasivo. La Iglesia « vive un deseo inagotable de brindar misericordia

Misericordiae Vultus

 

Ojos fijos en el señor

Con la mirada fija en Jesús y en su rostro misericordioso podemos percibir el amor de la Santísima Trinidad. La misión que Jesús ha recibido del Padre ha sido la de revelar el misterio del amor divino en plenitud. « Dios es amor » (1 Jn 4,8.16), afirma por la primera y única vez en toda la Sagrada Escritura el evangelista Juan. Este amor se ha hecho ahora visible y tangible en toda la vida de Jesús. Su persona no es otra cosa sino amor. Un amor que se dona gratuitamente. Sus relaciones con las personas que se le acercan dejan ver algo único e irrepetible. Los signos que realiza, sobre todo hacia los pecadores, hacia las personas pobres, excluidas, enfermas y sufrientes llevan consigo el distintivo de la misericordia. En Él todo habla de misericordia. Nada en Él es falto de compasión.

Misericordiae vultus, n.8

abrazo padre

Misericordiae vultus

AnoDeLaMisericordiaJesucristo es el rostro de la misericordia del Padre. El misterio de la fe cristiana parece encontrar su síntesis en esta palabra

Siempre tenemos necesidad de contemplar el misterio de la misericordia. Es fuente de alegría, de serenidad y de paz. Es condición para nuestra salvación. Misericordia: es la palabra que revela el misterio de la Santísima Trinidad. Misericordia: es el acto último y supremo con el cual Dios viene a nuestro encuentro. Misericordia: es la ley fundamental que habita en el corazón de cada persona cuando mira con ojos sinceros al hermano que encuentra en el camino de la vida. Misericordia: es la vía que une Dios y el hombre, porque abre el corazón a la esperanza de ser amados para siempre no obstante el límite de nuestro pecado

Misericordiae Vultus, bula convocatoria Año jubilar de la misericordia

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El papa Francisco advierte contra el peligro de Ideologizar la Fe. Creo que en España debemos tomar nota

Ayer, cuando el papa Francisco habló al CELAM dijo que una mala compresión de la nueva evangelización puede llevar a 1) Ideologizar la fe 2) El funcionalismo 3) El clericalismo.

En España observo que hay un grupo pequeño pero con influencia a través de ciertos medios, que defiende y propone la fe como quien lo hace con una ideología política. Usan el mismo lenguaje que los políticos de nuestro tiempo, más preocupados en dividir y crear un grupo de sectarios que en hacer crecer la comunión y llevar el Evangelio a todos los corazones. A sí mismos se ven como los defensores de la fe, atacan a los pastores, y levantan muros para preservar su ideología. Dan ‘carnet’ de católico o lo retiran. Hacen la voluntad de Dios siempre que coincide con la suya, y se autoproclaman voz del Espíritu Santo, ya sea para designar obispos, como para anunciar el fin de la vida religiosa.

El papa pidió al CELAM que planteen la pastoral desde la ‘revolución de la ternura’. La Iglesia es una madre que debe curar heridas. Creo que en España también nos hace falta enfocar así la pastoral. ¿Qué pensáis?

 

Discurso completo (texto y vídeo): http://www.aleteia.org/es/religion/noticias/documento-discurso-del-papa-a-los-obispos-del-celam-2965001

¿Quién no aprendió equivocándose? Lifted Pixar

En época de exámenes y viendo muchos estilos de educar, me pregunto si no huimos cada vez más de las dificultades. Personalmente creo que se educa de verdad enfrentando al otro a sus errores y a la responsabilidad de optar por algo, no dando pistas para suavizar o evitarle el sufrimiento de la responsabilidad y que pase cuanto antes el examen.

La paciencia del profesor tiene que ser tal que tolere una y otra vez los fallos, arregle lo que tenga que arreglar, y vuelva a confiar en el alumno, para que sea capaz de superarse a sí mismo, por sí mismo… Me recuerda a la pedagogía paciente y misericordiosa de Dios.