Despertarse para amar

Con libertad se ha de andar en este camino, puestos en las manos de Dios; si su Majestad nos quisiere subir a ser de los de su cámara y secreto, ir de buena gana.

Siempre que se piense de Cristo, nos acordemos del amor con que nos hizo tantas mercedes y cuán grande nos le mostró Dios en darnos tal prenda del que nos tiene: que amor saca amor. Procuremos ir mirando esto siempre y despertándonos para amar, porque, si una vez nos hace el Señor merced que se nos imprima en el corazón de este amor, sernos ha todo fácil, y obraremos muy en breve y muy sin trabajo.

Santa Teresa de Jesús

Saber mirar. Ver (VIII) Santa Teresa

El místico, cuando trata de describir sus experiencias más inefables, recurre al simbolismo, rompiendo los moldes que impone la lógica racional; el simbolismo de Santa Teresa nace, en cambio, de la observación cotidiana. El paisaje –no el paisaje artificioso y tópico propio de la literatura renacentista, sino el paisaje áspero y enjuto de Castilla– se convierte en alegoría de su aventura espiritual: los huertos rozagantes de verduras, refrescados por un pozo absorto, se convierten en refugios para la oración; las fuentes que surgen en el camino evocan la única agua que calma la sed; una liebre que brinca entre las matas o un gamo que busca un hontanar son vislumbres del alma en estado de gracia; un jabalí que hociquea furioso la tierra ilustra la desazón del pecado; los castillos amurallados y las torres vigía inspiran un vertical sentido de trascendencia. Y todo este rico simbolismo está expuesto con una simplicidad y llaneza en verdad milagrosas, con un estilo que Santa Teresa calificaba humildemente de «grosero y desconcertado» y que, en realidad, es la expresión más depurada, graciosa y elegante de nuestra bendita lengua; un estilo que pone a Dios ante los ojos del alma.

Juan Manuel de Prada, La hermosura misma, ABC 15.X.12

Sta Teresa. Sus frases en imágenes

Hace un par de años, estudiando en el noviciado la figura de Santa Teresa de Jesús, o Teresa de Ávila, se me ocurrió poner en imágenes dieciocho de las frases más célebres de la santa que nos dieron en una recopilación sacada de sus cartas y libros, y comenzarlo con una pequeña viñeta caricaturizando uno de los episodios más peculiares de la vida de Teresa, el enfrentamiento con la Duquesa de Éboli que, resumiendo mucho, trató de ser monja y princesa a la vez, reflejando los valores opuestos a la enseñanza de la santa que tuvo que tomar medidas drásticas.

Por eso esta recopilación puede ser lo que Teresa le dice a esa Duquesa de Éboli que hoy todos llevamos dentro.

Poco a poco las he ido publicando en Nova Bella y puedes consultarlas a continuación

Sta Teresa 1 – Jaque mate a Jesús
Sta Teresa 2 – Conforme a Cristo
Sta Teresa 3 – El único camino
Sta Teresa 4 – Araña o Abeja
Sta Teresa 5 – ¿Qué haces con tu tiempo?
Sta Teresa 6 – Propósitos para el nuevo año
Sta Teresa 7 – Contento con lo que nos dan
Sta Teresa 8 – God Inside
Sta Teresa 9 – Por señas
Sta Teresa 10 – Pecado sobre pensado
Sta Teresa 11 – No quiero más que le miréis
Sta Teresa 12 – Gente descontenta consigo misma
Sta Teresa 13 – Con amor y temor
Sta Teresa 14 – La discreción es gran cosa para el gobierno
Sta Teresa 15 – Amor propio
Sta Teresa 16 – Madurar la fe
Sta Teresa 17 – Sin miedo a la finitud
Sta Teresa 18 – ¿Tontos o humildes?

O descargar el PDF original que empleé para un regalo impreso como una colección de tarjetas

Sta Teresa 10 – Pecado sobre pensado

Este es el “pecado sobrepensado”: Cuando quien dice, Señor, aunque os pese haré esto; que ya veo que lo veis y sé que no lo queréis y lo entiendo; pero más quiero yo seguir a mi antojo que vuestra voluntad

Santa Teresa de Ávila C 71, 3