Wikileaks, su verdadera intención

Lo que hace WikiLeaks no es periodismo. La intención de la cabeza visible (y pararrayos) de la organización hacker es nada menos que hacer imposible el funcionamiento normal de las élites de poder, utilizando las filtraciones como arma para en la práctica forzar un cambio equivalente a una revolución. En 2006 Julian Assange publicó la teoría subyacente, según la cual las filtraciones no son un modo de exponer injusticias, sino un arma para dañar a los grupos organizados que conspiran para obtener y mantener el poder. Las líneas internas de comunicación seguras son requisito imprescindible de cualquier conspiración; el escape de datos desde estas redes cerradas, esqueleto de los grupos de poder, no sirve simplemente para exponer sus nefandas actividades, sino que dificulta (al hacer más arriesgada) la comunicación.

2 comentarios en «Wikileaks, su verdadera intención»

  1. Gracias Pablo. He leído la entrada en RTVE. Creo que ha dado en el clavo. Hay que digerir esto. ¿Cómo van a cambiar las relaciones diplomática? ¿y en qué manera quitan poder a los gobiernos que conspiran por tener el poder? ¿cómo afecta a la sociedad, ciudadanos, a la vida de las personas?

    Mi primera reacción es pensar que el clima de ‘desconfianza’ y ‘tensión’ va a aumentar enormemente, desconfianza entre gobiernos, y de los ciudadanos hacia sus gobiernos. En un contexto así se acelera la revolución política. Pero, ¿hacia dónde?

    Si a esto en un futuro no lejano se le suma la desconfianza que puede crear una oleada de leaks sobre las multinacionales. La producción, el consumo y el ‘libre mercado’ pueden verse afectados, y son la base del sistema capitalista.

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