“Tuvimos un rato de oración en la Santa Capilla, en el Pilar. Última hora del sábado, mucha gente, mucho ir y venir.
Uno de nosotros se lamentaba de que con tanto trasiego era complicado concentrarse en la oración y meditar.
«Yo hago una oración más pasiva, contestó otro hermano. Simplemente dejo que la Virgen me bendiga, que a través de la Llena de Gracia sigamos recibiendo a Jesús, la gracia de Dios”
Es lo que deseo para todos al comenzar este curso escolar