El verdadero Rey

Todas estas travesías llevan en definitiva a un palacio real, a una ciudad sobre la que brilla el sol, ante el trono de un rey…

Muchísimas veces (en los cuentos de los hermanos Grimm) son símbolos relacionados con el otro del yo profundo. Este sentido tenía también para los alquimistas medievales: no les interesaba fabricar oro por  la pura materialidad del oro, desligado de lo espiritual. Se trataba de un camino religioso, pasando por transformaciones sucesivas hasta llegar al yo y  al Ser absoluto»

Ana María Schlüter, El camino del despertar en los cuentos

Rey del cuento de hadas que sostiene una rana

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