Ermitaña urbana

 

La pregunta que se hace San Benito está en el corazón de cada persona: amar la vida, desear días felices…Pero, por un lado, no toda persona responde al deseo más íntimo de su corazón. Vivimos la vida con mucha dosis de inconsciencia y superficilidad. Por otro, si apuntamos una respuesta, viene a continuación el reto de vivir una vida con un determinado estilo, que nos va perfilando simultáneamente la presencia viva de un Dios que nos va mostrando el camino de la vida, con un perfil de lucha, pero también de paz y esperanza muy viva de felicidad.  Yo creo que hay una relación muy estrecha entre el ritmo de la vida humana y la experiencia de un Dios vivo en su espacio interior.

José Alegre, abad de Poblet

ermitaña urbana

Deja una respuesta