El anhelo eleva siempre la mirada a la luz, a las estrellas, esas que nos gustaría pescar, aunque fueran reflejos en el mar, para iluminar lo oscuro del alma, de las almas, del mundo…. porque Viene la luz al mundo, para iluminarnos y transformarnos en fuego, que es luz y calor. Lo hermoso de la encarnación es que las estrellas, que son soles, vienen a acariciarnos y a no quemarnos sino a transformar corazones para que irradien el amor de Dios, que atrapado en los rincones de nuestro ser,como el grisú en la mina, despertemos a esta energía, la gestionemos, la compartamos, la irradiemos..luz que no quema pero que nos abrasa, y no puede quedar atrapada… porque somos estrellas, soles.
IO
Un comentario en «Anhelo»
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Hola q tal gracías por tu aportación ya hace tiempo q no escribo.
Muy bonito y profundo el escrito.
La Biblia nos enseña q todos desde nuestra posición podemos colaborar a construir un mundo más justo y más humano sobretodo cn nuestro ejemplo.
Y haciendolo cn ternura,cn cariño y lo podemos hacer cn una sonrisa,cn un abrazo,cn una palabra d aliento o incluso cn una mirada d ternura.
Saludos.