El líder cristiano del futuro está llamado a ser alguien completamente irrelevante, y a presentarse ante el mundo ofreciendo solamente su persona totalmente vulnerable. Así es como Jesús vino a revelarnos el amor de Dios.
H Nouwen, En nombre de Jesús
El ojo de Allah
Conocimiento real
El conocimiento del artesano se limita a sus habilidades. Por ejemplo, yo sé mucho sobre lentes, sobre la sala de edición. Sé para qué sirven los diferentes botones de la cámara. Más o menos sé cómo utilizar un micrófono. Eso lo sé, pero no es verdadero conocimiento. Conocimiento real es saber cómo se vive, para qué vivir… Cosas como esas».
Kieslowski
el amor
Un pájaro me canta
y yo le canto
me gorgojea al oído
y le gorgojeo
me hiere y yo le sangro
me destroza
lo quiebro
me deshace
lo rompo
me ayuda lo
levanto
lleno todo de paz
todo de guerra
todo de odio de amor
y desatado
gime su voz y gimo
ríe y río
y me mira y lo miro
me dice y yo le digo
y me ama y lo amo
– no se trata de amor
damos la vida-
y me pide y le pido
y me vence y lo venzo
y me acaba y lo acabo.Idea Vilariño
amor
Amor
desde la sombra
desde el dolor
amor
te estoy llamando
desde el pozo asfixiante del recuerdo
sin nada que me sirva ni te espere.
Te estoy llamando
amor
como al destino
como al sueño
a la paz
te estoy llamando
con la voz
con el cuerpo
con la vida
con todo lo que tengo
y que no tengo
con desesperación
con sed
con llanto
como si fueras aire
y yo me ahogara
como si fueras luz
y me muriera.
Desde una noche ciega
desde olvido
desde horas cerradas
en lo solo
sin lágrimas ni amor
te estoy llamando
como a la muerte
amor
como a la muerte.Idea Vilariño 1961
Cristo y la Magdalena, Auguste Rodin
Estás aquí
Dulce nombre de María
Despejado
Cada mañana, con la cabeza despejada y serena, acojo las palabras sagradas. He llegado a entender que acogerlas no significa aferrarlas, sino ser alcanzado por ellas; estar tan tranquilo que me deje agitar por ellas, tan indiferente y sin planes personales previos que pueda recibirlos de ellas, tan soso que me deje salar por ellas»
Erri de Luca
El ciervo y la paloma
«(En el cántico espiritual), el ciervo y la paloma se vuelven a identificar(…) el ciervo, al aparecer por lo alto del otero (tangencia de cielo y tierra donde se cumplen todas las epifanías) a beber las aguas frías, no hace otra cosa que consumir a su amada transformada. La hace parte de su propio ser, la transforma en si precisamente por ser él un ciervo y ella una paloma/fuente»
Luce López Baralt, Asedios a lo indecible